lunes, 18 de enero de 2010

Utopías

Si ya lo dice Sabina: "yo no quiero un amor civilizado"
Y no le falta razón...

La civilización de los sentimientos hoy en día desgraciadamente es un hecho...cuando no debería, ya que, por definición, el amor es un sentimiento irracional...hiriente a la par que placentero; analfabeto en materia de costumbres, rutinas y prejuicios...anárquico porque no existe ningún tipo de ley que lo regule, cosmopolita porque no conoce fronteras...
Pensandolo bien; el amor es el único esquema de sociedad idealizada que podría ser posible hoy por hoy...Esa gran utopía...que ni en el terreno de los sentimientos parecemos acabar de decidirnos a cumplir.
Y es que, qué forma de estado existe a día de hoy que no necesite de reyes, sultanes, presidentes o cualquier otra clase de dictadores para mantenerse viva.
Qué orden socioeconómico puede llamarse comunista (pero comunista de verdad) porque el trabajo y los beneficios se repartan a partes iguales.
Qué clase de revolución jipi permite la alteración de los estados de la consciencia sin necesidad de estupefacientes.
Qué dulce que no engorda, qué poder no corrompe, qué montaña rusa no acaba mareando...

Y sin embargo,
nos encargamos de cargar con las maletas
de elegir el champú
de poner columpios en el jardín
de celebrar el 14 de febrero y cantarnos el cumpleaños feliz...


¿Y por qué no acabamos con las "normas", los corazoncitos tallados que matan la corteza de los árboles, las fechas de aniversario y simplemente...dejamos que nos tiemblen las piernas?

1 comentario:

  1. ¡cuánta razón tienes! lo que yo quiero, corazón cobarde, es que mueras por mí... ¡grande Sabina!

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